Alquiler de casas rurales para vacaciones en Candeleda

Es una casa estupenda, lo tiene todo, todas las comodidades. Hemos estado genial, todo al detalle. Gran capacidad. No creo recordar otra así

Muy bonito, un sito para descansar y disfrutar de la naturaleza

¡Hemos pasado un fin de semana fantástico! Nuestra estancia en la casa rural de Francisco ha sido encantadora. La casa cumplía con todas las descripciones, y nos sentimos en casa desde el primer momento. El lugar es acogedor, bien cuidado y es un ambiente perfecto para disfrutar de la naturaleza. Las vistas desde la casa eran inmejorables. Además, Francisco siempre estuvo disponible para cualquier consulta y nos ofreció su ayuda en todo momento. También nos recomendó restaurantes y lugares para visitar. Sin duda recomiendo a Francisco y su casa. ¡Seguro volveremos!

estuvimos genial. sin duda repetiremos. todos los amigos que fuimos se fueron encantados. gracias a Olisea y a Edicelys por su amabilidad

todo perfecto,la casa,la zona y sobre todo la anfitriona

la casa es preciosa, es muy amplia, y tiene todo lo necesario para que la estancia esa perfecta. Se descansa muy bien y los parajes de alrededor son preciosos. Por supuesto volvemos.

Nuestra estancia en La Casa de Chocolate, en Cuevas del Valle, ha sido inmejorable. La casa es preciosa, cómoda y decorada con muchísimo gusto, perfecta para disfrutar de unos días de desconexión en plena naturaleza. Todo estaba cuidado al detalle, y nos sentimos como en casa desde el primer momento. El entorno es una maravilla: rodeado de montañas y con rutas preciosas muy cerca, ideal para los amantes del senderismo o simplemente para quienes quieren respirar aire puro. Un detalle que nos encantó fue la bienvenida con unas riquísimas rosquillas caseras, un gesto que refleja el cariño con el que los anfitriones cuidan a sus huéspedes. En general, todo nos gustó muchísimo: la tranquilidad, el entorno, la limpieza, la comodidad… Sin duda, La Casa de Chocolate es un sitio al que volveríamos con los ojos cerrados. ¡Muy recomendable!

Tal y como se describe en las fotos. Casa muy tranquila para desconectar, limpia y ordenada. Han sido muy amables!

Pasamos unos días 3 familias con 4 niños incluyendo una bebé y tuvimos una estadía muy cómoda. La casa es amplia y mejor de lo que se ve en las fotos. Dámaso y Begoña fueron muy amables y la comunicación siempre fluida con recomendaciones de actividades y sitios donde encargar comida. Muchas gracias!!

¡La casa es maravillosa! Tiene una vista impresionante que realmente te invita a relajarte. El río está muy cerca y se puede escuchar su sonido tranquilo, lo que le da un toque aún más especial a la experiencia. Además, la casa está súper bien equipada, muy limpia y con todo lo necesario para una estancia cómoda. Es el lugar perfecto para desconectarse y disfrutar de la paz del entorno. ¡Recomendada al 100%!

La casa super limpia y muy acogedora, un lugar ideal para desconectar y hacer senderismo. Helena la chica encargada de la llegada, muy atenta y servicial, así que encantados de nuestra estancia en el Jazmín de la Fuente.

La estancia en la casa de Caridad,ha sido muy agradable.. Nos hemos sentido ,como en nuestro hogar.Toda la casa muy acogedora y yo que valoro muchísimo la limpieza,puedo decir que estaba todo genial... Las camas muy comodas,sábanas y toallas,todo súper limpio.. La comunicación con Caridad muy buena,una persona muy cercana y preocupada por que todo esté bien.. Si volvemos por la zona,no dudaremos en alojarnos en alguna de las casas de Caridad.. Un saludo y hasta pronto..

El alojamiento es increíble y el entorno más todavía . La casa es muy cómoda para grupo grande , con diferentes zonas en las que poder estar todos. Nos encantó y si surge la ocasión volveremos

Una casita agradable y muy limpia,en un lugar interesante y tranquilo.Muchas cosas que hacer. Ana tuvo el detalle de dejarnos desayuno!

Nos ha encantado, repetiremos seguro, zona muy bonita, tranquila y la casa muy agradable! Los peques y los perritos disfrutaron mucho!

Hemos estado muy bien. Camas cómodas, ducha agradable. Las vistas preciosas. menaje de cocina un poco justo pero suficiente.

nos ha encantado la casa! las camas son confortables, la cocina muy bien equipada y la decoracion bonita. volveremos!

La casa de Luis Miguel es un paraíso para disfrutar del paisaje y de tranquilidad. Es un sitio MUY RECOMENDABLE.Una casa con encanto y comodidades donde he pasado con mi familia unos días estupendos. Ha sido un placer para nosotros conocer a Luis Miguel que ha estado pendiente en todo momento súper atento para solucionar cualquier pregunta. Nos proporcionó información sobre restaurantes y actividades de la zona. La casa muy acogedora y nos hemos sentido como en nuestra casa.

Alojamiento fantástico para 7 personas y un perro en un pueblo pequeñito de Ávila y a una hora para disfrutar del Valle del Jerte. La comunicación con Ana fue buena, la casa muy limpia y con todas las comodidades. En el pueblo no hay nada, hay que comprar en los pueblos de al lado. Lugar fantástico para disfrutar de la naturaleza.

La casa es tal y como se muestra en el anuncio, muy bien equipada y limpia , y Almudena estuvo pendiente en todo momento. Muy recomendable,

Casa especial y muy cómoda. Tiene todo para pasar unos días y un jardín espectacular. Volveremos seguro!

Hemos estado como en casa, Pedro y Tere fueron muy atentos y amables. la vivienda está en sitio espectacular y tiene todo lo necesario.

Hemos estado muy satisfechos, desconexión total, ambiente agradable acompañado de muchas vistas bonitas y animalitos adorables. Cobi es un peluche grande y buen compañero en la estancia. ❤️ La casa acogedora y rural. Recomiendo vivir este descanso de la ciudad. Todos muy amables y hospitalarios.

Un chalet encantador, limpio y con comodidades modernas. Nos gustó especialmente la chimenea de leña, que utilizamos ya que hacía frío fuera por la noche. Una excelente ubicación en la parte superior del pueblo, que a su vez está enclavado en la ladera. A nuestro perro le encantó el espacio exterior vallado conectado a la villa y todos disfrutamos del paisaje cercano y la capacidad de caminar directamente hacia las colinas. Un punto que vale la pena mencionar es que las calles de la ciudad que conducen a la villa son estrechas. Estuvo bien para nosotros porque íbamos en coche, pero sería más difícil si los visitantes viajaran en un vehículo más grande, como una caravana.