HISTORIAS DE ANFITRIONES

Tessa como anfitriona

Tessa hospeda en Londres para sacarse un dinero extra.

¿Qué te impulsó a dar el paso y hacerte anfitrión?

Empecé en esta andadura sin muchas ambiciones durante los JJ. OO. Pensé: «Puedo sacarme lo suficiente para unas vacaciones o para pagar la calefacción.»

¿Qué te ha llevado a seguir recibiendo huéspedes todos estos años?

A medida que empecé a recibir huéspedes, me di cuenta de que mi mundo crecía cada vez más. Y eso me encanta. Me considero una embajadora de Londres, en el sentido de que conozco la ciudad como la palma de mi mano y puedo enseñar a la gente cosas que no aparecen las guías. Es mi regalo y les gusto por ello.

¿Alguna sugerencia o consejo para alguien que esté pensando en hacerse anfitrión?

No te preocupes tanto por tu casa y disfruta.

¿Consideras importante la Garantía para anfitriones?

Para mí es crucial. Me tranquiliza saber que cuento con un respaldo. Nunca he tenido que usarla porque he tenido unos huéspedes fantásticos y nos hemos dado confianza mutua. Pero esa confianza se sustenta sobre los cimientos de la Garantía para anfitriones.

¿Ser anfitrión ha cambiado tu estilo de vida?

Sí, muchísimo. He podido estudiar tres años de costura en Morley Art College. Todo lo que he podido coser, remendar y crear con mis propias manos, lo he hecho. También he viajado. Ser anfitriona me ha ayudado a pagarme una nueva cocina y otras mejoras.

Ahora que eres anfitriona, ¿cómo ha cambiado tu forma de tratar tu casa?

He aprendido a no dar tanta importancia a las cosas materiales.

Historias de otros anfitriones

Empieza a crear tu anuncio