Pedimos a todos los miembros de nuestra comunidad que sigan estas sencillas reglas para ser los viajeros ideales cuando se queden en un alojamiento:
Airbnb recomienda a los anfitriones que denuncien cuanto antes cualquier incumplimiento de estas reglas fundamentales. De hecho, no solo pueden hacerlo los anfitriones, sino también los vecinos.
Cuando un anfitrión tiene la sospecha o la certeza de que se han incumplido estas reglas fundamentales, le pedimos que siga estos pasos:
Estas reglas son muy importantes para nosotros, así que tomaremos las medidas necesarias para asegurarnos de que se cumplen. Si un huésped infringe las reglas fundamentales, es posible que le escribamos para recordarle en qué consisten o que le enviemos una advertencia para evitar que se repita. Cuando se denuncian infracciones graves o reiteradas de estas reglas fundamentales, también podemos suspender su cuenta o expulsarlo de la comunidad.
Además de las normas de la casa estándar que se incluyen en estas reglas fundamentales, los anfitriones también pueden añadir sus propias condiciones a su anuncio. Si un huésped las incumple, el anfitrión puede ponerse en contacto con nuestro equipo de Atención al Cliente para que lo ayude a tomar medidas.
Además de estas reglas fundamentales, es importante que la comunicación entre los anfitriones y los huéspedes sea eficaz para que las estancias vayan bien. Airbnb anima a los viajeros a dialogar con el anfitrión cuando este se ponga en contacto con ellos debido a algún problema, salvo que las circunstancias no lo permitan (por ejemplo, si no tienen cobertura).
Los viajeros pueden recurrir las decisiones que se tomen en el marco de esta política contactando con el equipo de Atención al Cliente o a través del enlace que les facilitemos para ello. A la hora de revisar un recurso, tendremos en cuenta cualquier detalle adicional que nos proporcione el viajero, como información nueva o corregida, las infracciones de nuestra Política de Evaluaciones u otras circunstancias relevantes.