Silvia: Llevo años utilizando Airbnb como huésped y siempre me ha encantado la idea. Decidí empezar a hospedar porque tengo una habitación extra y esta plataforma me da mucha flexibilidad.

Silvia: Como anfitriona en mi domicilio principal, me preocupaba mucho el tema de la seguridad, el ruido y, por supuesto, los posibles daños que pudiera sufrir la casa.

Mateo: Contar con la Garantía para anfitriones nos da mucha paz mental, porque los accidentes, sencillamente, ocurren. Estar cubierto te deja más tranquilo.

Silvia: Si estás pensando en hospedar en tu casa, no temas establecer tus propias normas. Deja muy claro lo que los huéspedes pueden y no pueden hacer para que no se hagan ideas equivocadas. La comunicación es la clave.

Silvia: Ahora dispongo de más dinero extra, lo que me permite viajar de una forma que, sin Airbnb, no podría haberme permitido.

Silvia: Hospedar me ha permitido conocer a gente de todo el mundo. Los huéspedes nunca dejan de sorprenderme. Cada vez es una experiencia diferente y, a menudo, nos traen regalos de su país. Mateo: Llegas a conocer bastante bien a tus huéspedes y ellos a ti. A veces, incluso, nos invitan a quedarnos en su casa allá donde vivan para, digamos, devolvernos el favor y hacernos sentir igual de bien recibidos.